Disfruta de una sesión de spa para consentirte y relajarte en casa
Deja ir el estrés y regálate un momento de relajación para restaurar el equilibrio y el bienestar de tu piel. Utiliza ingredientes naturales en tu rutina de belleza para lograr una piel humectada, limpia y suave.
Hacer una rutina de spa en casa es muy sencillo. Lo único que necesitas es regalarte a ti misma un momento de relajación, meditación y gratitud hacia tu piel y tu cuerpo. Todos los días, nuestra piel está expuesta a diversos factores que afectan su apariencia: el medio ambiente, la contaminación, los rayos del sol, la falta de hidratación, el estrés y nuestro estado emocional. Aunque no lo creas, la piel es la primera en resentir cuando no estamos en un estado de equilibrio físico y mental, por lo que es importante tomarse el tiempo para cuidarla, restaurarla y consentirla para que luzca suave, relajada, humectada y limpia.
Para hacer una rutina de spa en casa puedes hacer uso de ingredientes que ya tienes, pues ¡no hay nada más nutritivo y saludable para la piel que utilizar aceites e ingredientes naturales!
Ya sea que tu objetivo sea lograr una limpieza profunda, un masaje con facial o, bien, cuidar tu piel después de la depilación, estos consejos y técnicas te ayudarán a lucir una piel suave, humectada y saludable.
En primer lugar, hidrata tu piel. Este es, quizá, el consejo más básico para el cuidado de la piel. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda beber 8 vasos diarios de agua. La piel es la primera en decirnos que necesitamos agua, pues la deshidratación provoca una apariencia cansada, áspera, tirante, opaca y envejecimiento prematuro. Activa tu organismo tomando un vaso de agua después de levantarte y otro vaso antes de dormir. Tu piel lo agradecerá.
Te compartimos 10 ideas para una sesión de spa en casa que te ayudarán a consentirte y relajarte naturalmente.
1. Prepara el cuarto de baño para tu rutina de spa.
Reúne todo lo que necesitarás para realizar tu rutina de spa: toallas limpias y suficientes, crema humectante para después del baño, un cepillo de cerdas naturales, aceites esenciales para el rostro, ingredientes para las mascarillas, etc. Comienza preparando el espacio con aromaterapia utilizando, por ejemplo, aceites esenciales de lavanda, bergamota o naranja, los cuales son reconocidos por sus propiedades relajantes y calmantes.
2. Exfoliación en seco para activar el sistema linfático.
Con la ayuda de un cepillo de baño de cerdas naturales y de una dureza mediana a suave, aplica tu exfoliante casero y dale un ligero masaje a todo tu cuerpo con movimientos circulares. Comienza por las piernas, desde los pies, y sube por la cadera, el abdomen, los brazos y el cuello. Esta técnica sencilla mejorará tu circulación, reducirá la apariencia de celulitis en las piernas, eliminará la piel muerta y estimulará todo tu sistema linfático, el cual se encarga de eliminar las toxinas en el cuerpo. De igual forma, esta técnica prepara la piel para antes o después de la depilación.
3. Elimina impurezas en la nariz, mejillas y barbilla.
Prepara tu piel para la rutina de belleza eliminando las impurezas del rostro. Date un ligero masaje en el área a tratar. Masajea ligeramente el contorno de la nariz, pues esta área acumula mucha suciedad. Enjuaga con agua tibia.
4. Mascarilla de avena y miel para una limpieza profunda del rostro.
La miel es uno de los mejores ingredientes que le puedes regalar a tu piel. Esta mascarilla, en combinación con la avena, tiene propiedades exfoliantes y humectantes. Además, abre los poros para recibir todos los nutrientes que vas a aplicar en tu rutina de spa en casa, balancea el pH y restaura el brillo natural de tu piel. Para aplicarla: muele ½ taza de avena hasta que esté hecha polvo, mezcla con un poco agua purificada y 2 cucharadas de miel (elige una de buena calidad) e integra todo hasta obtener una pasta. Aplica en el rostro y deja reposar durante 20-30 minutos. Enjuaga.
5. Masajea tu cuerpo con un jabón nutritivo.
Con la ayuda de una esponja de baño, lava suavemente tu cuerpo con agua tibia y jabón Palmolive® Luminous Oils Macadamia y Peonía Sensación Revitalizante, que ayuda a limpiar suavemente tu cuerpo, dejando una sensación de humectación y suavidad en la piel. Cuida que el agua para tu baño en tina o ducha no sea demasiado caliente, pues las altas temperaturas son contraproducentes para el cuidado facial, del cuerpo y el cabello.
6. Restaura tu piel después de la depilación.
La depilación con cera es un procedimiento agresivo para la piel pues, además de remover el vello corporal de raíz, también elimina los aceites naturales de la piel. Por ello, es importante restaurar el nivel de humectación y disminuir la inflamación. Durante el baño o la ducha, aplica aceite de almendras o manteca de karité en las piernas y las áreas recién depiladas. Masajea suavemente para que los ingredientes naturales penetren por los poros que, después de haber pasado unos minutos en el agua tibia, ya estarán abiertos y listos para recibir los nutrientes y el cariño que le estás regalando a tu piel.
7. Seca tu cuerpo suavemente.
Cuando estés lista para salir del cuarto de baño, no te apresures. Tómalo con calma, recuerda que este es un regalo de autocuidado. Aunque suene contraproducente, date una ducha de agua fría durante 5 segundos, pasando todo tu cuerpo, rostro y cabello por el agua refrescante. Este paso ayudará a cerrar los poros de la piel. Ahora, utiliza una toalla limpia y seca cuidadosamente todo tu cuerpo, sin restregar la piel contra la toalla. En cuanto al rostro: déjalo secar naturalmente, sin pasar la toalla por él. Este paso ayudará a que tu piel retenga toda la humectación que le acabas de dar; esta es una rutina que puedes aplicar todos los días, no solo en las ocasiones de spa en casa. ¡Verás la diferencia en cómo tu rostro se mantiene humectado durante el día!
8. Aplica aceite de uva o aceite de aguacate al rostro.
Cuando el rostro esté todavía ligeramente húmedo, aplica unas gotitas de aceite de uva o aceite de aguacate en el rostro y el cuello o, bien, una combinación de ambos. Estos aceites tienen propiedades antioxidantes, se absorben con facilidad y ayudan a conservar la humedad natural de la piel. El aceite de uva aporta vitamina E y ayuda a mejorar la textura de la piel; en cambio, el aceite de aguacate, además de vitamina E, contiene vitamina A, B1, B1 y B3, todas excelentes para el cuidado de tu rostro y cuello. Da un ligero masaje en el rostro con las yemas de tus dedos para que los aceites penetren bien. Divide tu rostro por la mitad en dirección vertical partiendo de la nariz y realiza movimientos ascendentes desde el centro hasta las orejas. Este masaje estimula el drenaje linfático del rostro.
9. Refresca y aromatiza tu piel con agua de rosas.
La mejor forma de aplicar el agua de rosas en el cuerpo y rostro es con la ayuda de un atomizador. Rocía suavemente toda tu piel con el agua de rosas, disfruta el momento y respira profundamente la fragancia. Deja que tu piel absorba el tónico, no apresures el proceso. Date tiempo y agradece este espacio de bienestar que has creado en tu casa.
10. Aplica loción humectante en todo el cuerpo.
Si seguiste toda esta rutina, estarás más relajada y lista para descansar. Aplica tu loción humectante diaria en tu cuerpo. Continúa con movimientos suaves, sin restregar la piel. Recuerda que tu cuerpo y tu mente han pasado por un proceso de cuidado, relajación y cariño, así que te recomendamos vestirte con ropa cómoda, suave y de fibras naturales como el algodón.
Recuerda que el autocuidado no es un lujo, es una actividad que puedes hacer una o dos veces por semana y los resultados los disfrutarás no solo en la apariencia saludable y suave de tu piel sino también en tu estado emocional. El mejor secreto de belleza es el autocuidado desde dentro del organismo hacia afuera, utilizando técnicas sencillas, ingredientes naturales y, sobre todo, la consistencia en la rutina.
Referencias:
Los 8 mejores aceites para mantener la piel joven y saludable, Daniela Echeverri Castro, 2016.
8 vasos al día, Instituto de Investigación Agua y Salud.
Cuidados de la piel post depilación, Karla Henríquez, 2020.